Quienes vivimos en la ciudad de Bs. As. nos enfrentamos a diversos pormenores diariamente: caos de tránsito con sus consecuentes bocinazos y contaminación, por nombrar solo algunas. Pero sin duda el flagelo más importante es la humedad. ¿Qué hacemos esos días en que los simpáticos especialistas en clima nos dicen que hay 100% de humedad? Básicamente tenemos tres opciones: ceñir nuestro cabello en un rodete cual bailarinas del Teatro Colón, hacer caso omiso a las advertencias y terminar como el rey de la selva o utilizar una crema para peinar para contrarrestar los efectos del clima. Cuando nos decidimos por la tercer opción nos encontramos ante otro dilema: ¿qué crema para peinar usamos?.
En el mercado hay infinidad de opciones y todas prometen hacer milagros. Cada producto nuevo que es lanzado al mercado es una nueva esperanza... y una nueva decepción: ya perdí la cuenta de todas las que probé con la ilusión de que "Esta sí va a hacer lo que promete". El resultado es siempre el mismo: cabello opaco, pesado y sin brillo, pero eso sí sin frizz. ¿Pelo pesado o pelo con frizz? Esa es la cuestión.
Buscando diferentes alternativas me acerqué un día al stand de Klorane. Había escuchado muy buenos comentarios de sus productos pero nunca los había probado. Ese día me retiré con el Tratamiento sin aclarado a la leche de papiro y una nueva promesa en mi bolsa. Esta emulsión, más líquida que una crema, promete alisar los cabellos secos e indisciplinados. Si es por indisciplinado, mi cabello lleva varias amonestaciones. Dice además "Delicadamente perfumado, su textura ligera y fundente alisa la fibra capilar sin dejar pesado el cabello." ¡Eso era lo que yo buscaba! Debo decir que mi cabello rebelde encontró en este tratamiento a su domador. ¡Por fin un producto que hace lo que promete! Realmente ayuda a prevenir el frizz y lo más importante es que al ser más liviano que una crema no deja el pelo pesado y opaco.